"No intentes cambiar tu pasado. Vive tu presente y edifica tu futuro con dicho pasado como cimiento." (E.)

jueves, 9 de junio de 2022

Bailo yo y la montaña canta.

El amor tiene algo parecido a escalar una montaña de a dos y confiar ciegamente en que el otro instaló el cable de seguridad exitosamente. Y no importa cuánto repitamos que el cable es seguro, ante la primera caída las palabras de ambos se cuestionan y queda expuesto cuán real fue lo que venían prometiéndose. En toda subida en algún momento va a haber una caída y ahí descubrirán el estado de sus cuerdas. En esos momentos críticos se darán cuenta de si se van a caer al vacío o si logran aguantar y quedar sostenidos por el amor hasta volver ubicarnos en el mismo camino. 

Y si un día las sogas se cortan, te voy a agradecer por haberlo intentado, por la seguridad del viaje y por la experiencia de la subida. Pero sé que ninguno puede prometerle al otro que llegar a la cima es un hecho seguro.

martes, 7 de junio de 2022

Impasse

 No se puede cambiar lo que ha pasado, pero ahora tengo miedo de que vuelva a pasar. ¿Es que valgo algo?

lunes, 6 de junio de 2022

Todas esas cosas que te diré mañana.

 Wabi sabi o la belleza de la imperfección. Uno de sus elementos es el kintsugi, de forma que se repara algo haciendo hincapié en la fractura, destacándola con oro. Se presta atención al detalle, reconociendo que se ha quebrado y ya no es lo mismo.

La profecía autocumplida es la cara negativa del hecho de manifestar. Es decir, tienes miedo de que pase algo y al final acaba sucediendo. Así que cuando se vuelven realidad tus peores miedos, no hay nada más que la negatividad y la desesperanza. Y cuesto aceptarlo porque esto aunque se pueda compartir no aligera la carga. Ojalá fuera tan fácil como decirte que te vayas y te quedes con tus decisiones, que yo no quiero saber más. Pero no lo es porque no es lo que quiero. Yo quiero llevar a cabo nuestros planes, a pesar de este rodeo. Así que lo intento aceptar para buscar la transformación. Pero me tira hacia abajo y no sé cómo has llegado hasta ahí, cómo no te pude ayudar antes identificando las señales. Y me queda la profunda duda de que quieras seguir con esto adelante porque ahora vas a cambiar. Y tengo miedo de que te des cuenta de que no vale la pena, ahora que ya lo has probado. Porque en el fondo, y de manera egoísta por mi parte y quitándole todo el contexto, me da la impresión de que te daba igual. Que solo después te di pena. Pero es difícil asegurarlo ya, porque para llegar hasta aquí tuve que hacer de poli malo y sacarte las cosas y que las fueras reconociendo una a una. De entrada, para nada, porque hay poco alivio y mucho bucle. Más adelante espero que seas capaz de decirme lo que quieras, pero hasta ahora querías decirme pocas cosas. Me alegrará escucharlo de tu propia iniciativa.

Yo por otra parte me quiero sentir viva, más viva que nunca. Porque estaba trabajando en ello antes de esto. Para poder estar a la altura de una relación emocionante. Me quiero sentir bien conmigo misma, verme guapa y atractiva. Ponerme lencería y saber que me queda bien. Saber que soy suficiente sin cuestionamientos indirectos. Porque esto es lo que soy. Y eso es lo que duele, no saber qué te ha alejado. Pero me estoy repitiendo que yo no tengo que probarme si tienes dudas de mí. Siempre me habías dicho que tomar decisiones implica hacer renuncias, que no se puede tener todo. Pero con esta decisión que has tomado tú parece que sí lo querías tener todo porque estabas insatisfecho de alguna forma. Ahora vas a tener que trabajar en ti más que en nada en lo que hayas trabajado antes y ser consciente de lo que tienes ahora, en este momento. Ese es el rayito de esperanza que le veo a lo nuestro. Un camino de transformación en el que tendrás que ahondar en lo que eres y en lo que quieres de verdad, sin dudas, sin tientos. Y con las justas lamentaciones. Solo con un cambio más palpable podremos dejar esto atrás y hablar de que está superado bel et bien.

domingo, 5 de junio de 2022

Profecía autocumplida.

Ahora todas las canciones, buenas y malas, hablan de nosotros.

¿Prosperaremos? Porque tener la razón es terrible. El nudo de la cabeza a los pies es obsesivo ya. Parece que lo que teníamos estaba mal construido. Y la crisis de suministros también afecta a esta reforma emocional. No hay tiempo estimado de finalización. Y da rabia porque las expectativas se han trastocado. Ya no somos los mismos.